Casi siempre te fuiste sin decirme

Casi siempre te fuiste sin decirme,
ni tan siquiera luz,
ni tan siquiera agua,
casi siempre te tuve entre mis versos,
bordándome palabras.

Casi siempre tu adiós fue de rutina,
ni tan siquiera luz,
ni tan siquiera agua,
casi siempre buscando tu sonrisa
tras mi ventana.

Casi siempre tu marcha era de duelo,
ni tan siquiera luz,
ni tan siquiera agua,
casi siempre amarrado a una estampida
de noche helada.

Casi siempre pensándote de lejos,
ni tan siquiera luz,
ni tan siquiera agua,
casi siempre espoleándome los sueños
en la distancia.

Casi siempre dejabas mi mañana,
ni tan siquiera luz,
ni tan siquiera agua,
casi siempre sonámbulo en un río
de luna pálida.

Casi siempre partías sin promesas,
ni tan siquiera luz,
ni tan siquiera agua,
casi siempre perdido entre los rastros
de cuando estabas.

La Canción Que Nunca Diré, Gustavo Adolfo Medina

2 comentarios en “Casi siempre te fuiste sin decirme”

Deja un comentario